- Área: 364 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Nico Saieh
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Proveedores: Bastro
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El encargo.
Este proyecto en Piedra Roja es una vivienda diseñada para una familia integrada por un matrimonio y sus cuatro hijos, dos pequeños y dos jóvenes. Debido a lo anterior, la casa debía disponer de recintos que permitan compatibilizar las distintas actividades de sus integrantes y a la vez propiciar la convergencia del grupo familiar y sus cercanos.
También fue un requisito que los padres tuvieran cierto dominio sobre lo que sucede en la casa, entendiendo las dimensiones de ésta.
Además, la casa debía desarrollarse en un piso y aprovechar al máximo la relación con su entorno y la iluminación natural por medio de amplios ventanales.
El terreno y el emplazamiento de la casa.
El terreno colinda con un parque interior y en su forma casi triangular, buena parte de sus deslindes son caras expuestas al condominio.
De esta forma, la primera estrategia de diseño fue extender la casa lo más posible, de modo de generar un área protegida de las vistas desde el exterior, donde se ubicarán los recintos y el patio principales de la casa, en una sucesión de volúmenes abiertos al norte, separados por pequeños patios y jardineras interiores.
El Algarrobo (Prosopis chilensis).
En el sitio existe un gran algarrobo. Entonces, la casa, junto con extenderse por el sitio, se diseñó para dar espacio a este árbol e incluirlo como parte integral del proyecto. Los recintos de uso público se relacionan directamente con el algarrobo por medio de terrazas y ventanales.
Arquitectura pasiva.
Se tomaron consideraciones de eficiencia energética por medio del diseño de arquitectura pasiva, con el uso de pieles ventiladas en la envolvente (tabiques perimetrales y cubiertas), orientación al norte de los recintos principales, inclusión del paisajismo como herramienta de enfriamiento, estudio y aplicación de capas de aislación térmica, utilización de DVH Low-e, etc.
Destaca la proyección de techos con alero a partir de la inclinación solar para cuidar los recintos del asoleamiento, lo que hace que la casa se distinga formalmente, sin pretenderlo, del resto de las del barrio.
El recorrido de la casa.
Por la geometría de la casa, se producen relaciones programáticas entre los recintos más domésticos. Por ejemplo, entre el taller, el comedor de diario y el estar familiar se materializa un pequeño patio sur que se configura finalmente como una nueva manera de encontrarse y recorrer la casa.
Actualmente, los jardines de la casa se han integrado con el parque colindante y con el paisaje natural de los cerros, logrando que sus deslindes se desdibujen. Del mismo modo, es la casa la que define sus límites y el ámbito de protección de la intimidad familiar, prescindiendo de cercos u otras obligaciones normativas del condominio. Hacia el interior, la casa esté constantemente mirándose a sí misma.